sábado, 29 de diciembre de 2012

Chile: acusan a exoficiales de muerte de Víctor Jara

Por primera vez la justicia chilena responsabiliza a oficiales retirados de la muerte del popular cantante, ocurrida el 16 de septiembre de 1973, a pocos días del golpe contra Salvador Allende.


Por BBC Mundo


A casi cuarenta años del asesinato del cantante chileno Victor Jara, la justicia inició un proceso contra un grupo de exoficiales del ejército de Chile a los que señala de ser presuntos autores y cómplices del crimen.

El juez especial que lleva la causa, Miguel Vásquez, acusó a los extenientes Pedro Barrientos y Hugo Sánchez Marmonti de ser los autores del homicidio del cantante, ocurrido el 16 de septiembre de 1973, cinco días después del golpe de estado contra el entonces presidente Salvador Allende.

En las detenciones masivas realizadas tras el golpe, Jara -considerado como un emblema artístico del gobierno de Unidad Popular que encabezaba Allende- fue detenido junto a miles de personas y llevado al estadio Chile, en Santiago.

Allí fue torturado y asesinado a balazos, convirtiéndose en uno de los casos más emblemáticos de las violaciones a los derechos humanos cometidas en Chile por el gobierno militar de Augusto Pinochet (1973-1990).

Como cómplices del crimen Vásquez señala a Roberto Souper Onfray, Raúl Jofré González, Edwin Dimter Bianchi, Nelson Hasse Mazzei, Luis Bethke Wulf y Jorge Smith Gumucio, todos oficiales que estaban presentes en el estadio y quienes cumplen prisión preventiva en un batallón de la policía militar.

Justicia tardía

El juez Vásquez apuntó que "para mí las presunciones de quién disparó es Barrientos", contra quien se emitió una orden de captura internacional, ya que está residenciado en Florida, sur de Estados Unidos.

En mayo de este año, un equipo del canal de televisión Chilevisión logró conversar con Barrientos a las afueras de su casa en Florida, pero este rechazó cualquier vinculación con el asesinato de Jara e incluso negó haber estado en el estadio Chile en aquella fecha.

Este viernes, el juez Vásquez explicó a la prensa chilena que la lentitud del sistema de justicia chileno en llegar a esta etapa de acusación se debe en parte a la "falta de colaboración" para identificar a los presuntos responsables del hecho.

"Desde un principio ha habido distintas líneas de investigación; ha sido (la causa del lento proceso) fundamentalmente la falta de colaboración. Luego de reunir muchos antecedentes hay un momento en que uno debe avanzar dictando esta resolución", dijo Vásquez.

Según datos recabados por soldados conscriptos los imputados eran los responsables de la operación de detención de simpatizantes de Allende.

En junio de 2009 se realizó el juicio a la única persona que ha sido procesada hasta ahora por el caso: José Paredes, de 54 años, entonces un soldado conscripto quien confesó ser uno de los que disparó contra Jara.

"Hay que buscar los altos mandos. Yo sólo era un "pelao" (conscripto) no más", dijo Paredes a la prensa cuando fue detenido, aunque luego se retractó y fue puesto en libertad provisional.

En diciembre de 2009 la Policía de Investigaciones entregó un informe en el que se precisa que las balas que causaron la muerte de Jara son de un calibre distinto al que utilizaba el fusil del ex recluta.

Satisfacción familiar

"Nosotros como querellantes en este juicio indudablemente que estamos bastante satisfechos con lo que se ha logrado", dijo a los medios chilenos el abogado Nélson Caucoto quien representa a la familia de Jara.

Caucoto dijo creer que hay suficientes evidencias como para garantizar la condena de los acusados, en un caso cuya documentación calificó como "compleja".

El abogado recordó que la viuda del cantante, la británica Joan Turner, y la Fundación Víctor Jara siempre han exigido que se de a conocer la lista de nombre de los oficiales responsables del manejo de los arrestos en el estadio Chile.

En una reciente entrevista con el canal Cablevisión Turner expresó su esperanza de que los militares aportaran la información que les han solicitado sobre los mandos que estaban presentes en el estadio Chile en los días del golpe contra Allende.

"Nos hemos entrevistado con muchos ministros de Defensa, que se supone que es la vía para lograr llegar al comandante en jefe del día (en el estadio Chile), pero hemos llegado hasta ahí no más. No ha dado frutos ese camino", dijo Turner.

lunes, 10 de diciembre de 2012

De la gloria de Messi a la pasión de Müller

Los 86 goles de ‘la Pulga’ ya están en un catálogo en el que pueden encontrar los más mínimos detalles de cada uno de ellos. Los del ‘Bombardero’ apenas yacen en la memoria de los viejos aficionados.



Por Víctor Diusabá

Puede ser, de lejos, uno de los peores goles de final alguna de los mundiales. Alemania, 7 de julio de 1974, estadio olímpico de Múnich. Minuto 43 del primer tiempo. El partido está uno a uno entre el anfitrión y Holanda. Bonhof, en función de ‘7’, logra llegar por la derecha, casi hasta el fondo, tira un centro bajo y los tres hombres que llegan quedan en contrapié.  Dos son defensas de la ‘naranja mecánica’ y el otro es un tipo bajito, casi regordete, tiene la camiseta número 13. La pelota pega en una de sus canillas y parece irse de su control.

Gerd Müller hace lo de siempre: no se rinde y desafía las leyes físicas. Gira sobre el eje de su pierna izquierda y con la derecha alcanza a tirar, mal, pero tira. El balón salta a botes, uno de los zagueros no alcanza a cerrar y el arquero Jongbloed, con un absurdo número ocho en sus espaldas, la ve pasar a un paso pero está tan sorprendido que ni se tira.

Müller sale a celebrar con esos saltos de jugador de potrero, sus compañeros, por fin, logran bajarlo de las alturas para celebrar. Es un gol feo, antiestético, bizarro, más fruto de la torpeza que de la oportunidad. Qué importa, es un gol que vale un mundial.

  

Hay muchos más recuerdos de Gerd Müller, pero casi todos se pierden en la niebla o en las figuras de muchos de sus contemporáneos (Desde Pelé hasta Beckenbauer, pasando por Cruyff y Mazzola). El ‘bombardero’ nunca tuvo glamour, ni siquiera en ese apodo barato que le pusieron. Ahora, casi 40 años después, vuelve a sonar. Ya no por cuenta propia sino como simple referencia de un muchacho todo maravilla que no se le parece en nada: Lionel Messi. Mucho va del simple olfato al arte.

¿Recordará Müller con precisión los 85 goles con que impuso un récord en 1972, ese mismo que dejó de ser el domingo pasado en el Ramón Sánchez Pizjuán de Sevilla a nombre de Messi, que subió el listón a 86? Seguro que no.

Tampoco lo haría Messi si le piden que eche a rodar la película. Para eso, dirá el argentino, están los estadígrafos:  Con zurda (el 90%) 75, ocho con la derecha. Tres, de cabeza. Doce desde fuera del área y 74 adentro. 65 en cabalgatas fantásticas. 14 de penalti y 7 de tiro libre. 56 después del descanso, 17 en los últimos diez minutos. Papá del Bayern Leverkusen y del Málaga, con media docena a cada uno. ¿El socio? Iniesta. ¿Y con Argentina? No es igual, pero eso poco importa, por ahora.

Pero, ¿qué fue de Müller? No del hombre que salió a felicitar a Messi, como era de esperarse, sino de la superestrella del fútbol alemán. Una suma de desgracias y, ahora, de esperanzas. Pero, en general, muy poco bueno que contar. Ahora tiene 67 años (nació casi al mismo tiempo del fin de la segunda Guerra Mundial) y vive rodeado de los pocos que siguen a su lado, casi siempre la familia. Los curiosos son mantenidos a distancia., a veces lo ven desde detrás del alambrado cuando cumple con su compromiso de servir de instructor de las divisiones menores del Bayern Múnich.

La salud no le ayuda para superar su evidente fragilidad. Hace unos años, en Trento, Italia, dejó a la vista los alcances del exceso de consumo de alcohol. Andaba con el equipo y de pronto se esfumó. La Policía lo encontró luego de una intensa búsqueda y de identificarlo tras intentar, en vano, preguntarle quién era. Dicen que buscaba un taxi para volver a casa, que estaba a centenares de kilómetros.

A partir de ahí, tuvo entonces que enfrentar la final más dura. Con la ayuda de Franz Beckenbauer y de Uli Hoeness ingresó a un tratamiento que incluyó, de entrada, someterse a romper con la adicción. Cuenta que lo amarraban a la cama y él se desataba. Confiesa que vivió un infierno. Ellos le ofrecieron trabajo en el Bayern y desde entonces comenzó una nueva vida. Son ya 21 años de victorias, personales, no menos valiosas que las de los años de gloria, con dos hinchas que jamás lo abandonan: su esposa Uschi y su hija Nicole.

Para ellas, como para quienes no lo olvidan, Gerd siempre será ‘el bombardero’, autor, ni más ni menos, de una Copa Mundo, una Eurocopa, cuatro estrellas del Bayern Múnich y una Copa Intercontinental. ¡Casi nada!

¿Y el récord de los goles? No hará falta, ahora es de Messi.

Publicado originalmente en Semana.com

lunes, 5 de noviembre de 2012

Ding dong (Leonardo Favio)



Fuad Jorge Jury, mejor conocido por su nombre artístico de Leonardo Favio, fue un destacado cantautor de los años 70 que además fue uno de los mayores exponentes de la cinematografía argentina.

Murió este lunes en Buenos Aires a los 74 años, dejando un legado no sólo de películas de vanguardia sino una importante carrera como músico y una reconocida militancia en el peronismo.

miércoles, 3 de octubre de 2012

El Diego debuta con Argentinos Juniors



El debut de Diego Armando Maradona en la primera división argentina se produjo el 20 de octubre de 1976 en un juego entre su equipo, Argentinos Juniors, y Talleres de Córdoba.

El Diego ingresó al comenzar el segundo tiempo. En la primera jugada en la que participó le hizo un túnel a un adversario. En referencia a esa tarde, Maradona dijo: "ese día toqué el cielo con las manos".

viernes, 7 de septiembre de 2012

Fútbol en Chile un 11 de septiembre: mucho más allá de las eliminatorias

La FIFA se negó a cambiar la fecha del encuentro entre Chile y Colombia por las eliminatorias, dispuesto para el mismo día del aniversario del golpe militar de Pinochet. En 1973, la misma entidad se empeñó en programar un partido eliminatorio, también en Santiago, a dos meses de ese mismo golpe.


Por Camilo Rueda Navarro

Hace unas semanas la FIFA negó la solicitud de la Federación de Fútbol de Chile de cambiar la fecha del partido ante Colombia, previsto para este martes 11 de septiembre, por las eliminatorias al Mundial. En la fecha se conmemora en el país austral el aniversario del golpe militar de Augusto Pinochet contra el gobierno de Salvador Allende, y suele haber fuertes protestas.

La FIFA desestimó la solicitud argumentando mantener la “equidad deportiva” y la imposibilidad de afectar el calendario internacional previamente estipulado. La máxima autoridad del deporte más popular del mundo ignoró las implicaciones de la fecha, como también lo hizo en ese 1973 que se recuerda.

Para Chile, el 11 de septiembre es más que una simple fecha en el calendario. Ese día se le causaron a la nación austral muchas heridas aún sin cicatrizar. En 1973 se produjo el sangriento golpe de Estado que acabó con la primera experiencia de un gobierno socialista instaurado por victoria electoral, el de la Unidad Popular de Allende. Y abrió paso al régimen militar de Pinochet, que dejó miles de ejecutados, desaparecidos y exiliados, así como también hizo de Chile un modelo de Estado neoliberal y autoritario que luego se reprodujo en otros países de la región.

Pero el 11 de septiembre de 1973 no sólo cambió de tajo la política chilena. También se afectó el calendario futbolístico internacional. Chile debía jugar el "repechaje" al Mundial de Alemania ’74, nada menos que ante la Unión Soviética.

El partido de ida se jugó el 26 de septiembre, a sólo dos semanas del golpe en Chile, en el Estadio Lenin de Moscú, donde se decretó un frío cero a cero. Todo se debía definir en la revancha, programada en Santiago el 21 de noviembre.

Pero en Santiago, en los días posteriores al golpe, el Estadio Nacional se empezó a usar como campo de concentración a donde eran llevados por los militares cientos de detenidos. Además, la Unión Soviética rompió relaciones diplomáticas con Chile, tras conocer el desarrollo de los acontecimientos en aquel septiembre.

Según registró el periodista Pablo Aro Geraldes en un reportaje sobre el episodio, una comisión de la FIFA, acompañada de directivos de la Federación de Fútbol de Chile, visitó el escenario, recorrió la cancha y dictaminó que el estadio era apto para jugar. La comitiva estuvo integrada por el brasileño Abilio D’Almeida, vicepresidente, y el suizo Helmuth Kaeser, secretario general. Arribó a Chile el 24 de octubre y se quedó 48 horas en Santiago.

Pese al visto bueno de la FIFA, los soviéticos se negaron a viajar a Santiago, en repudio a la dictadura. "Hablamos con el plantel y decidimos no jugar la revancha. No quisimos hacerlo porque estaba Pinochet en el gobierno. Para nosotros era peligroso viajar a Chile y le llevamos nuestra preocupación a la federación de fútbol", dijo el jugador Oleg Blokhin, estrella del fútbol soviético condecorado con el balón de oro en 1975.

Algunos críticos señalaron que la Unión Soviética no tenía nada que reprochar porque en su territorio también había campos de concentración, conocidos como "Gulag", como denunció el escritor Aleksandr Solzhenitsyn, premio Nobel de literatura en 1970.

La URSS pidió jugar el encuentro fuera de territorio chileno, solicitud negada de tajo. Así que decidieron abstenerse de jugar. La Federación de Fútbol de la Unión Soviética emitió un comunicado donde explicaban que no jugarían allí donde miles detenidos de la dictadura habían sido torturados y asesinados.

"Los deportistas soviéticos no pueden en este momento jugar en el estadio de Santiago, salpicado con la sangre de los patriotas chilenos", dijo el documento. "La Unión Soviética hace una resuelta protesta y declara que en las actuales condiciones, cuando la FIFA, obrando contra los dictados del sentido común, permite que los reaccionarios chilenos le lleven de la mano, tiene que negarse a participar en el partido de eliminación en suelo chileno y responsabiliza a la administración de la FIFA por el hecho", agregó el comunicado, difundido por la agencia UPI.

Ante la situación, y en una de las decisiones más vergonzosas de la historia del fútbol, se programó el partido sin el rival. Los chilenos salieron a la cancha y anotaron un gol ante un arco vacío. Y la FIFA aprobó en definitiva la participación chilena en el Mundial, donde a la postre no ganó ningún partido.

Cuatro décadas después, los dirigentes del fútbol mundial se empeñaron en programar un partido el 11 de septiembre, a pesar del trasfondo de la fecha. La federación chilena mantuvo a Santiago como sede, aunque por lo menos cambió el escenario: se jugará en el Estado Monumental de Colo-Colo. Y su rival ya no será la Unión Soviética, sino Colombia, tal vez su mejor aliado de la región y que por su afinidad política no pondría ningún inconveniente.

Publicado originalmente en Semana.com

lunes, 6 de agosto de 2012

Himno de Bogotá



Letra de Pedro Medina Avendaño; Música de Roberto Pineda Duque. Oficializado mediante el decreto 1000 de 1974.

sábado, 28 de julio de 2012

Amada mía, amore mío


De la banda sonora de "A Roma con amor" de Woody Allen. Versión original de 1977 de El Pasador.

sábado, 14 de julio de 2012

Santa Fe campeón 1975

La sexta estrella cardenal

El más reciente título de Santa Fe en el campeonato colombiano data de 1975. La temporada se dividió en dos torneos: Apertura y Finalización. En el primer semestre Santa Fe fue tercero, mientras que en la segunda mitad del año se consolidó como primero del Grupo A.


El equipo campeón: Arriba, de izquierda a derecha: Alonso ‘Cachaco’ Rodríguez, Leonardo Recúpero, Rafael Pacheco, Luis Gerónimo López, Bernardo Chia, José Antonio ‘Caneca’ Tébez. Abajo: Teo García, Juan Carlos Sarnari, Carlos Alberto Pandolfi, Ramiro Viáfara y Hernando Piñeros


El título se definió en un hexagonal final, que fue jugado por Santa Fe, su rival de patio, el Deportivo Cali, el Atlético Bucaramanga, el Junior de Barranquilla y el Independiente Medellín.

El León, con una fecha de anticipación, se coronó por sexta vez campeón de Colombia, dejando en segundo lugar a Millonarios. El técnico fue el chileno Francisco Hormázabal.

miércoles, 13 de junio de 2012

Teófilo Stevenson: un deportista de verdad

El cubano Teófilo Stevenson fue tres veces campeón olímpico y mundial. En 1972 rechazó la oferta de un millón de dólares para pelear contra Muhammad Alí.



Por Redacción Deportiva
El Espectador

Su grandeza va mucho más allá de lo que indican los resultados, que de por sí ya son impresionantes. El boxeador cubano Teófilo Stevenson fue tres veces campeón olímpico (en Múnich 1972, Montreal 1976 y Moscú 1980) y tres más monarca mundial aficionado (La Habana 1974, Belgrado 1978 y Reno 1986).

Sin embargo, por lo que más será recordado es por no haberse dejado tentar por la fama y el dinero, por haber rechazado una millonaria oferta para emigrar y convertirse en deportista profesional. En 1972 le pusieron sobre la mesa un millón de dólares para que peleara con Muhammad Alí, pero dijo que no.

Sus demoledores derechazos lo convirtieron en el campeón de todos los tiempos, título que le dio el pueblo cubano, que, encabezado por los hermanos Fidel y Raúl Castro, le dio ayer un multitudinario adiós en La Habana, en donde murió la noche del lunes víctima de una cardiopatía isquémica.

Stevenson tenía 60 años y será recordado como ejemplo de patriotismo, dignidad y apego a su pueblo, pues a pesar de ser el mejor boxeador aficionado de la historia, dominando durante dos décadas las principales competencias de los pesos completos, nunca se sintió más que sus compañeros ni abusó de los privilegios a los que tenía derecho en la isla por sus éxitos deportivos.

Colgó los guantes en 1986. Se despidió con una victoria al noquear en el combate por el oro mundial de ese año al estadounidense Alex García. Después se dedicó a entrenar a las nuevas generaciones y a dirigir la Federación Cubana de Boxeo.

Su deceso tomó por sorpresa a sus compatriotas, pese a que hacía cinco meses había sufrido una afección vascular que lo mantuvo varios días en la sala de cuidados intensivos.

Capítulo aparte merece su relación con Alí, su contrincante frustrado. Su esperado duelo en la década de los 70 jamás se realizó y el mundo del boxeo y el del espectáculo se quedaron sin saben quién era mejor.

Pero los dos pugilistas se convirtieron en amigos. Stevenson visitó a Alí en Estados Unidos y fue su anfitrión en las visitas que cumplió la leyenda estadounidense, ya enfermo de párkinson, a La Habana, en 1996 y 1998, en una misión humanitaria.

El Gigante de Delicias, como lo conocieron sus amigos y los narradores deportivos, por el ingenio azucarero donde nació en el oriente cubano, celebró su primer combate a los 14 años y el último a los 34, dejando un impresionante registro de 301 victorias y sólo 20 derrotas, dos de ellas a manos de su peor pesadilla, el ruso Igor Visotski, a quien nunca pudo vencer.

Hijo del inmigrante Teófilo Stevenson Pearson, oriundo de la isla antillana de San Vicente, y de la cubana Dolores Lawrence, el exboxeador será recordado como una de las grandes leyendas de los Juegos Olímpicos, en los que no pudo ganar un cuarto oro consecutivo debido al boicot cubano en las justas de Los Ángeles 1984.

Y aunque defendió como ninguno las decisiones políticas de sus gobernantes, también se preocupó por difundir la idea de que el deporte debía ser un mecanismo para integrar a las naciones. Paz en su tumba.

viernes, 8 de junio de 2012

Famosa foto símbolo del horror de la guerra de Vietnam cumple 40 años

La famosa fotografía de la “niña del napalm” cumple este viernes 40 años convertida en ícono de los estragos de la guerra, un aniversario en el que sus protagonistas recordaron la capacidad de una imagen para cambiar el curso de la historia.


Kim Phuc tenía solo 9 años cuando un avión del Ejército survietnamita bombardeó su pequeño pueblo de Trang Bang, cerca de Saigón (hoy ciudad Ho Chi Minh), en un ataque coordinado con el mando estadounidense que trataba de controlar el abastecimiento por carretera entre Camboya y Vietnam.

Los informes de Estados Unidos indicaban que no había civiles en la localidad, según explicaron posteriormente los militares al frente de la operación, quienes dieron luz verde al lanzamiento de misiles cargados de napalm, un combustible capaz de calcinar cualquier forma de vida, que convirtió el lugar en un infierno en llamas.

“Hasta entonces yo era una niña feliz”, aseguró Phuc quien atemorizada se había refugiado con su familia en el templo de Cao Dai.

El fuego de esas bombas, que alcanza 1.200 grados, carbonizó sus ropas y le causó quemaduras en el 65 por ciento de su cuerpo, especialmente en su espalda y brazo izquierdo, cuya piel se derretía del calor.

Phuc salió corriendo por la carretera desnuda, presa del dolor -”¡muy caliente, muy caliente!”, gritaba-, con el rostro en llanto, igual que otros de sus parientes. Un momento que inmortalizó el fotógrafo vietnamita Nick Ut quien cubría la Guerra de Vietnam para la agencia estadounidense Associated Press.

Esa instantánea tomada el 8 de junio de 1972 dio la vuelta al mundo y mostró los horrores del conflicto a la sociedad internacional hasta el punto de que fue decisiva para acelerar el final de los enfrentamientos.

“La Guerra de Vietnam terminó gracias a esa fotografía”, aseguró a Efe el fotógrafo, quien esta semana se reencontró con Phuc en una conferencia organizada por la iglesia baptista Liberty de Newport Beach, en el sur de California.

Aquella imagen fue una de las muchas que tomó Ut en aquel conflicto, aunque ésa marcó su carrera y le valió el premio Pulitzer.

“Para mí parece que fue ayer, es muy triste, miro de nuevo a las fotografías y se ve lo terrible que fue la guerra, todas las guerras, no solo Vietnam”, comentó el reportero gráfico que ahora tiene 61 años y aún sigue en activo.

Ut volvió a desempolvar aquellas instantáneas con motivo del 40 aniversario de aquel 8 de junio, unos documentos que no captan lo que pasó a continuación pero que el fotógrafo se encargó de narrar.

“Fui a ayudarla al instante (a Phuc) porque su piel se le estaba desprendiendo del brazo y la espalda. No quería que muriera. Dejé mi cámara y empecé a echarle agua encima, luego la metí en mi coche y nos fuimos al hospital, sabía que podría morir en cualquier momento”, relató Ut.

Kim Phuc llegó en estado crítico al centro médico y el personal, escaso de recursos, la envió directamente al tanatorio, donde pasó tres días.

“Pero no me moría”, contó Phuc, quien gracias a un amigo de su padre terminó por ser realojada en unas instalaciones para quemados donde estuvo bajo tratamiento durante 14 meses.

“Es un milagro que sobreviviera”, confesó la mujer cuya historia emocionó a los feligreses californianos a los que enseñó las cicatrices en su brazo quemado, aún visibles a pesar de haberse sometido a 17 operaciones para reconstruir el tejido incinerado por el napalm.

Las secuelas psicológicas, apuntó Phuc, duraron mucho más. En su caso, encontró la paz que estaba buscando en 1982 a través de la fe cristiana que ahora predica con una sonrisa, según declaró.

“Estoy muy contenta. Pienso que la fotografía es un regalo muy poderoso para mí y creo que el mundo es mejor gracias a ella, porque ha hecho que la gente sea más consciente cuando piensa en guerras”, manifestó.

Desde hace 15 años Kim Phuc es embajadora de Buena Voluntad de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).

Con información de EFE

lunes, 21 de mayo de 2012

Stayin' Alive (Bee Gees)


"Stayin' Alive" (Sobreviviendo) es una exitosa canción disco de los Bee Gees compuesta para la banda sonora de la película Saturday Night Fever (Fiebre de sábado por la noche) y lanzada como segundo sencillo el 13 de septiembre de 1977.

Alcanzó el Top 5 de todas las listas de éxitos de los países donde fue lanzada, y dio título, en 1983, a una secuela de la citada película.

lunes, 30 de abril de 2012

Las Madres de Plaza de Mayo recuerdan el aniversario 35 de la agrupación

El 30 de abril de 1977, 14 mujeres se atrevieron a desafiar a la dictadura para exigir conocer el paradero de sus hijos desaparecidos.



Separadas por asuntos ideológicos, aunque unidas por el mismo dolor, las Madres de Plaza de Mayo recuerdan el nacimiento de la organización humanitaria al cumplirse este lunes 35 años de la primera vez que se reunieron para reclamar a la dictadura argentina por sus hijos desaparecidos.

"Estamos preparadas como novias, con alegría, con mucha emoción y con ganas de llorar también", destacó Hebe de Bonafini, quien preside la más radical de las dos organizaciones en que las Madres de Plaza de Mayo están divididas desde hace 26 años.

La dirigente dijo que hoy es "un día de felicidad" porque si bien "esta historia comenzó por el horror, después hay momentos en los que uno vuelve a ser feliz".

"Nosotras hicimos lo que cualquier madre haría por un hijo", dijo a su vez Mabel "Taty" Almeida, una de las titulares del sector más moderado de la organización humanitaria.

"Ninguna de nosotras decidió llevar un pañuelo blanco en la cabeza. Ninguna decidió ser una Madre de Plaza de Mayo, pero nos llevaron lo más preciado que tiene una mujer, que es un hijo", sostuvo.

Ambos sectores han organizado para este lunes una serie de actividades para conmemorar el 30 de abril de 1977, cuando 14 mujeres se atrevieron a desafiar a la dictadura para exigir conocer el paradero de sus hijos desaparecidos.

Además del primer golpe que sufrieron con la desaparición de sus hijos, las Madres soportaron estoicamente otro acontecimiento que las sacudió a finales de 1977: el secuestro de Villaflor, Esther Ballestrino y María Ponce, las tres fundadoras de la organización cuyos cuerpos fueron enterrados en fosas comunes e identificados en 2005.

Después de hacerse visibles en el mundo, en 1986, durante el Gobierno constitucional de Raúl Alfonsín, la agrupación se dividió en dos tras la aprobación de una ley de reparación económica a los familiares de los asesinados y desaparecidos y a quienes habían sufrido encarcelamiento y torturas por sus ideas políticas.

Mientras la Asociación Madres de Plaza de Mayo se negó a recibir el resarcimiento, las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora dejaron en cada familiar de las víctimas la decisión de aceptarlo.

Un año antes habían celebrado conjuntamente las condenas a prisión perpetua recibidas por algunos jerarcas militares en el histórico Juicio a las Juntas.

Dos tremendos mazazos para la organización fueron la aprobación de las denominadas "leyes del perdón" a represores en 1986 y 1987, también durante el Gobierno de Alfonsín, y los indultos a implicados en la represión dictados en 1989 y 1990 por el entonces presidente, Carlos Menem.

La llegada en 2003 de Néstor Kirchner a la Presidencia del país, desde la cual impulsó la derogación de las "leyes del perdón", lo que derivó en la reapertura de cientos de causas contra agentes de la dictadura, reconcilió a las Madres con la política.

Ese alineamiento con el oficialismo se mantuvo durante toda la Administración de Kirchner (2003-2007) y aún hoy con el Gobierno de su esposa y sucesora, Cristina Fernández.

El año pasado, la agrupación que lidera Bonafini quedó en el ojo de la tormenta por una denuncia por malversación y desvío de fondos públicos destinados a un plan de viviendas sociales contra Sergio Schoklender, exapoderado de la Fundación Madres de Plaza de Mayo y mano derecha de la dirigente.

La causa judicial está en marcha y por ella el próximo 15 de mayo deberán declarar Sergio Schoklender, Alejandra Bonafini, hija de Hebe de Bonafini, y Pablo Schoklender, hermano del exapoderado, entre otros.

EFE

viernes, 6 de abril de 2012

Bobby Sands: la dignidad de los presos republicanos

Bobby Sands (1945-1981) fue un republicano irlandés que lideró las protestas de los presos políticos de Irlanda del Norte contra la opresión de las autoridades británicas.



Fue condenado por posesión de armas en 1972. Estuvo los siguientes tres años en la cárcel de Long Kesh. Fue puesto en libertad en 1976 y se convirtió en activista de la comunidad. Seis meses más tarde, Bobby Sands volvía a ser arrestado y encerrado en la prisión de Maze. Desde allí, escribía artículos para la revista Republican News que eran sacados de la cárcel en pequeños trozos de papel higiénico, y mostraban, con todo detalle, la terrible realidad de la vida carcelaria.

Participó en la huelga de hambre de 1981 en protesta por las penosas condiciones de la vida en la prisión, y ese año, estando encarcelado, fue candidato por el Sinn Féin para las elecciones al parlamento británico por la circunscripción de Fermanagh & South Tyrone.

El 9 de abril resultó elegido. Mantuvo su huelga de hambre y murió casi un mes después, el 5 de mayo, tras 66 días sin ingerir alimentos. Bobby Sands se convirtió a partir de ese momento en el símbolo de la resistencia de la población norirlandesa contra la ocupación británica. La vida de Bobby Sands no fue más que el reflejo de una sociedad acostumbrada a luchar, a combatir y a morir.

Su caso conmocionó al mundo y se convirtió en uno de los acontecimientos que más relanzó propagandísticamente al IRA, tanto a nivel nacional como internacional. Con su muerte, el IRA y en general toda la causa irlandesa se legitimaron ante los ojos de la opinión pública mundial. No fue el último en morir. Con él otros nueve activistas perdieron la vida en la huelga de hambre, hasta que finalmente el IRA dio la orden de finalizar la protesta.

En la película "En el nombre del hijo" se relatan crudamente estos hechos, con el actor John Lynch haciendo el papel de Sands.

Texto tomado de: http://keikai.blogspot.com

domingo, 25 de marzo de 2012

Guillermo Cano jugando fútbol


Guillermo Cano, gran apasionado al fútbol, hincha de Independiente Santa Fe, jugando un partido en el Gimnasio Moderno en 1976.

martes, 20 de marzo de 2012

Alfonso Cañón: el mejor futbolista bogotano de la historia


Alfono Cañón, "El Maestrico", el más grande de la historia de Santa Fe y del fútbol bogotano. Jugó 504 partidos con la camiseta cardenal, con la que anotó 146 goles y ganó tres campeonatos (1966, 1971 y 1975).

sábado, 17 de marzo de 2012

"El Padrino" celebró 40 años

La que muchos consideran la mejor película en la historia del cine estadounidense se estrenó hace 40 años (el 15 de marzo de 1972), que se recuerdan en medio de una controversia entre los estudios y el heredero del autor de la obra original.


Por BBC Mundo

"El Padrino", considerada por muchos la mejor película en la historia del cine estadounidense, se estrenó hace 40 años, pero la celebración se ha visto empañada por una controversia entre los estudios y el heredero del autor de la novela que dio origen al filme.

La película, estrenada el 15 de marzo de 1972 con el título 'The Godfather' no sólo catapultó a la fama a su director, el por entonces desconocido Francis Ford Coppola, sino que resucitó la carrera del astro de Hollywood, Marlon Brando, por su papel protagónico de Don Vito Corleone, uno de los capos de la mafia en Nueva York.


Todo empezó con una novela de Mario Puzo, un escritor neoyorquino de una familia de inmigrantes italianos, como los personajes de su obra, ambientada en su ciudad en la década de 1940 y que también representó su consagración como autor.

La versión romántica de los entretelones y la brutalidad del crimen organizado y su principal familia, que originalmente iba a ser una película de clase "B", terminó siendo un gran éxito, tanto para el público como para la crítica.

Jack Rico, crítico de cine de showbizcafe.com y miembro de la BFCA (Asociación de Críticos de Cine, por sus siglas en inglés), dijo que "El Padrino" se "puede definir como quizás la mejor película en la historia del cine estadounidense, por la manera en que trae a sus personajes a la historia".

Según Rico, la película afectó al público no sólo de Estados Unidos, sino de todo el mundo "con una historia donde cada elemento de la película era perfecto, era fantástico... muchas personas la ven no como una película, sino como una obra de arte".

"El Padrino" tuvo 11 nominaciones al Oscar, de las cuales ganó por Mejor Película, Mejor Actor -para Marlon Brando- y Mejor Guión Adaptado -para Coppola y Puzo.

jueves, 15 de marzo de 2012

Liverpool levanta su primer trofeo europeo

Los reds: campeones de la Copa UEFA 1972/1973 de la mano de Bill Shankly


Liverpool llegó a la final de la Copa UEFA tras eliminar en la semifinal al Tottenham, venciendo 1-0 en su estadio de Anfield y clasificando por el gol de visitante a pesar de caer 1-2 en la revancha. Debió enfrentar entonces al Borussia Monchengladbach, un durísimo elenco alemán.

El triunfo por 3-0 en Anfield fue demoledor para los alemanes que no pudieron detener a Keegan, autor de los primeros dos goles y asistente de Lloyd para el tercero. Los ingleses inclusive pudieron aumentar el marcador de no haber sido por la buena labor del arquero Kleff.

La revancha en tierras germanas fue como se preveía: un monólogo del local que finalizó el primer tiempo ganando 2-0 con tantos del goleador Heynckes, pero en la segunda parte el conjunto visitante ajustó las marcas sobre los delanteros. Los del Borussia tiraron innumerables centros que fueron despejados por los defensores o atrapados por el arquero hasta que llegó el final y la consagración como campeón.

domingo, 19 de febrero de 2012

La Guerra de las Galaxias

En 1977 fue estrenada la primera entrega de la saga Star Wars, La Guerra de las Galaxias

Hay muchas películas de éxito. Hay muchas películas que son enormemente populares y han sido vistas por millones de espectadores en todo el mundo. Pero son muy pocas las que se han hecho un lugar en el imaginario colectivo como el que ha conquistado la saga Star Wars.


Para bien o para mal, personajes públicos de toda índole, desde artistas hasta políticos, hablan de "la Estrella de la Muerte", "la Fuerza", "el Imperio del Mal", y de viajes realizados a la velocidad de la luz... y el público comprende inmediatamente a qué se refieren.

Es indudable que Star Wars sigue presente en muchos aspectos de nuestra vida. En el cine, donde directores y productores de películas tan distintas como E.T. El extraterrestre, American Pie, Toy Story, Austin Powers y Robots no pierden ocasión rendir homenaje (en ocasiones irónico) a las películas de la saga Star Wars. En la televisión, donde Los Simpsons, The O.C. y Saturday Night Live aprovechan las aventuras y personajes de Star Wars para arrancar sonrisas a su público.

En el deporte, donde los Boston Red Sox han llamado a su archienemigo, los New York Yankees, "el Imperio del Mal", mote que los Yankees han adoptado con alborozo. En el cómic, donde Star Wars ha sido tema favorito de tiras cómicas de todo tipo, desde Daniel el travieso y Hi and Lois hasta Doonesbury y Boondocks, y ha aparecido en infinidad de libros.

En el colegio, donde los educadores utilizan cada día a los personajes de Star Wars para enseñar matemáticas, ciencia y lengua; y en los museos que atraen a grandes multitudes para ver exposiciones basadas en Star Wars.

El propio George Lucas opina al respecto: “Estoy sorprendido de que la gente no se haya dado cuenta. Creen que es toda esa alta tecnología y los efectos especiales lo que hace que los espectadores quieran ver estas películas una y otra vez. Lo más interesante para mí es que, después de La Guerra de las Galaxias, se han hecho muchas películas de ciencia-ficción y con efectos especiales..., pero nadie ha querido volver a verlas una vez tras otra”.

Incluso en los parques temáticos, donde los Star Tours son una de las atracciones preferidas en los parques temáticos de Disney en todo el mundo.

El universo de Star Wars va más allá de la pantalla y lo encontramos en nuestros hogares presente en múltiples tipos de soporte. Cuando se publicó, en 2004, la Trilogía Star Wars fue el estuche de DVD más vendido de la historia en los Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia, Italia, Japón, Australia y muchos otros países de todo el mundo.

La venta de productos LEGO basados en Star Wars experimentó un aumento sin precedentes, y millones de personas acceden cada día en Internet al juego Star Wars: Galaxies, un juego online que admite una enorme cantidad de jugadores simultáneos.

Los videojuegos de Star Wars, de Lucas Arts, son extraordinariamente populares, y las novelas que versan sobre el "universo ampliado" de Star Wars acceden periódicamente a lista de libros más vendidos del New York Times.

El legado de Star Wars también ha influido en el modo de hacer cine. Para lograr los asombrosos efectos visuales de Star Wars, George Lucas fundó Industrial Light & Magic. Desde entonces, ILM ha recibido 14 Premios de la Academia a los mejores efectos visuales por su trabajo en una amplia variedad de películas, y continúa abriendo nuevas vías a la industria de los efectos visuales.

Star Wars Episodio IV. Una nueva esperanza fue decisiva para mejorar la tecnología del sonido cinematográfico, popularizando el sistema Dolby de reducción de sonido y dando lugar a la creación del sistema THX y la introducción del sonido digital, ahora presente en la mayoría de los cines.
Lucasfilm Ltd. también fue pionera en el uso de los sistemas de montaje digital no lineal, que, además de abrir nuevos horizontes a los montadores de sonido e imagen, condujeron al desarrollo del sistema Avid, la herramienta de montaje cinematográfico más utilizada en la industria del entretenimiento.

Los célebres experimentos de Lucasfilm en el campo de la animación infográfica fueron posibles gracias a los beneficios generados por las películas de la saga Star Wars y condujeron a la creación del ordenador Pixar. Y éste, a su vez, dio lugar a la fundación de los estudios independientes Pixar Animation, enormemente populares, y responsables de películas como Toy Story y Buscando a Nemo.

Uno de los avances más significativos y de más trascendencia aportados por la saga Star Wars fue el uso pionero de técnicas de producción cinematográfica digitales.

El Ataque de los Clones fue el primer gran largometraje creado con videocámara y videocinta digitales de alta definición de 24 cuadros por segundo.

Para La Venganza de los Sith se desarrolló una tecnología nueva, llamada '444', que graba imágenes con una cámara de alta definición con una resolución mucho mayor que la que podía obtenerse anteriormente. Y a medida que los cineastas de todo el mundo optan por el uso de cámaras digitales, cada vez son más las salas de cine que instalan sistemas de proyección digital.

Es posible que con La Venganza de los Sith la saga Star Wars haya concluido, pero la fiesta acaba de empezar.

Texto extraído de http://www.cineyletras.es

viernes, 10 de febrero de 2012

Santa Fe campeón 1971

Santa Fe obtuvo su quinta estrella en el torneo de 1971, al vencer en partido extra al Atlético Nacional, y al superar a los favoritos Cali y Millonarios.

El equipo que obtuvo la quinta estrella: parados, de izquierda a derecha: Manuel Ovejero, Jaime Rodríguez, Luis Augusto “Chiqui” García, Walter Morales “Waltinho”, Domingo “Tumaco” González y Miguel Angel Basílico. Abajo, en el mismo orden: Alfonso Cañón, Leonídas Aguirre, Luis Alberto Montaño, Víctor Campaz y Walter Sossa.

Como hecho curioso, el título sólo se resolvió hasta febrero de 1972. El cuadrangular final, que definía al campeón, quedó empatado por Santa Fe y el verde de Antioquia con siete puntos, por encima de Millonarios y Deportivo Cali.

Se disputó así una serie final que también quedó empatada (dos igualdades a cero goles). El tituló debió resolverse entonces en un partido extra en cancha neutral (Cali), jugado el 10 de febrero de 1972.


Santa Fe ganaba dos a cero con goles de Miguel Arce (minutos 5 del PT y 2 del ST). Nacional descontó a los 13 minutos del ST e igualó en el 36. A siete minutos del final, Pedro Alzate puso el 3-2 definitivo con el que el "Expreso Rojo" ganó su quinto título y el cupo a la Copa Libertadores de 1972.

El goleador del equipo cadenal fue Víctor Campaz, con 24 tantos.

miércoles, 1 de febrero de 2012

martes, 17 de enero de 2012

Bolívar: tu espada vuelve a la lucha

Historia de la espada de Bolívar, robada por el M-19 el 17 de enero de 1974 en su primera operación.


Por Manuel Francisco Carreño

A comienzos de los años setenta Lucho Otero era un integrante de las FARC que trabajaba en conformar un grupo urbano de la organización, por orden de Jacobo Arenas y de Manuel Marulanda. Por esas épocas Otero y otros compañeros, entre los que se incluía Jaime Bateman, leyeron un libro sobre los Tupamaros, el grupo guerrillero del Uruguay, quienes se robaron la bandera del prócer José Gervasio Artigas, quien fuera el Libertador de dicho país.

Después de leer ese libro, a Otero se le ocurrió la idea de robar la espada de Bolívar. Otero le comentó la idea a Bateman, quien le sugirió se lo propusieran a las FARC. “Eso fue como en el año setenta. El flaco va ante las directivas del Partido Comunista y propone la idea. Contestan que eso no vale la pena porque la espada es un aparato de museo” [1]. Bateman, Otero y otros más, se distancian del partido, ellos quieren conformar un grupo de lucha armada urbana.

En 1973, ya fuera de las FARC, los mismos Tupamaros los inspiran para hacer un movimiento no muy conocido, llamado “Los Comuneros", que dura de febrero a octubre de 1973. Este movimiento, hace las primeras operaciones de inteligencia, para lo que más adelante sería la sustracción de la espada de Bolívar en 1974.


El símbolo bolivariano

La espada de Bolívar no sólo se volvería el símbolo del movimiento, también sería el soporte de un pensamiento novedoso dentro de los movimientos de izquierda en Colombia: El pensamiento bolivariano. Hasta ese momento los movimientos guerrilleros en Colombia tenían como principales fuentes ideológicas las revoluciones de China o Rusia, “hasta ese momento la guerrilla colombiana estaba en la decisión sobre sí Moscú o Pekín, si el leninismo o el maoísmo, pero nosotros en cambio éramos nacionalistas” [2]. El M-19 instauró un movimiento basado en símbolos más cercanos a la historia y tradición colombianas, pensaron en figuras que hubieran luchado por el país y no en historias sobre revoluciones a cientos de kilómetros de Suramérica. Parecía que el nuevo grupo insurgente, que empezaba a formarse en 1973, veía esos ideales de lucha latinoamericanos encarnados en Bolívar como un excelente soporte ideológico.

Con esto se buscaba darle a la revolución una identidad, identidad con la que el pueblo se sentiría mucho más identificado.

“Queríamos hacer un movimiento para el país, para la gente común y corriente, para la gente que quisiera cambiar este país. Y el nacionalismo allí era un factor esencial que no veíamos en las FARC. Comenzamos a pensar en el tipo de operación político militar, que se relacionara con Bolívar, para reivindicarlo, para alejarlo de los libros de historia” [3].

Bolívar era la imagen de un luchador contra la opresión, de un hombre que había empuñado las armas para defender y proteger a su pueblo, esto era lo que el M-19 buscaba hacer, de esta forma aquella idea de Lucho Otero sobre el robo de la espada encajaba perfectamente.

La sustracción

Una vez conformado el M-19, y rescatada la idea de Lucho Otero empezaron los operativos para “devolver la espada de Bolívar a la lucha”, al tiempo que se hizo una gran campaña de expectativa, para que los colombianos supieran de qué se trataba. En los principales periódicos del país del 15, 16 y 17 de enero de 1974 empezaron a salir unos curiosos letreros que decían: “Parásitos? Gusanos?, Falta de memoria?, Inactividad? ya viene M-19”. La gente en la calle, hacia apuestas sobre qué era el M-19. Casi todo el mundo pensaba que era algún tipo de medicamento. Pero mientras la gente apostaba, los del movimiento dejaban todo listo para la acción definitiva en la Quinta de Bolívar.

El miércoles 17 de febrero apareció el último letrero que simplemente decía “ya viene el M-19”. Ese mismo día se hizo la operación del robo de la espada como la de la toma del Concejo de Bogotá. A cargo del operativo estuvo Alvaro Fayad conocido como “el turco". A las 5 de la tarde, cuando salieron todos los visitantes de la Quinta el operativo empezó, se intimidó al personal de vigilancia, se rompió el candado de la habitación que daba a la de Manuelita Sáenz, allí estaba guardada la espada. Fayad rompe la urna donde se encuentra la espada, y la toma en sus manos: “Tomo en mis manos la espada. Me impresiona por lo pequeña. Es muy pequeña. ¡Que sensación tenerla! ¡empuñarla!”, dice Fayad en el libro de Olga Behar.

Salen de la Quinta en un Renault 12 prestado, no sin antes dejar panfletos alusivos al movimiento que explicaban qué era el M-19, por qué había nacido y quiénes eran sus enemigos.

La ruta de la espada

El revuelo que causó la pérdida de la espada no se hizo esperar. Fue primera página de todos los periódicos, quienes mostraban la mezcla de indignación y sorpresa en la que se encontraban los colombianos, incluso días después salieron informes especiales sobre el origen de la espada. “La espada todo un símbolo”, titulaba El Tiempo. Curiosamente era la primera vez que se le mencionaba en los diarios. Parecía que a la gente sólo le importó la famosa espada una vez la habían sustraído, antes de eso duró más de 50 años reposando en la quinta de Bolívar, casi totalmente olvidada.

Aquellos titulares de prensa hablaban de grandes operativos, que pretendían recuperar el artefacto, al día siguiente de su desaparición. Eso nunca pasó, entre otras cosas porque el M-19 siempre supo cómo esconderla. Los días siguientes a su sustracción la espada se guardó en un prostíbulo de Bogotá, de donde sólo salió dos meses después, para ir a la casa del poeta León de Greiff, quien siempre mostró simpatía hacia el movimiento.

Ahí empezó la gran travesía de la espada que incluyó una estadía en la casa del poeta Luis Vidales, y otros artistas e intelectuales colombianos. Pasó por un apartamento en el barrio Santa Bárbara y una finca en las afueras de Bogotá, hasta que finalmente fue sacada del país y llevada a Cuba en 1980. En 1986 nace la orden de los guardianes de la espada, título simbólico que se le dio a aquellas personas que simpatizaban con la causa del M-19, donde se incluyen, Fidel Castro, Ómar Torrijos, y las madres de la Plaza de Mayo [4]. Durante todos estos años la espada de Bolívar estuvo siempre presente en la memoria de los colombianos, ahora que era invisible, tenía la importancia que nunca tuvo cuando era visible para todo el mundo. La espada, 200 años después de ser empuñada, como tantas armas de la historia universal, se había vuelto un mito.

sábado, 14 de enero de 2012

The Damned United: Una historia de fútbol y pasiones

Reseña de la gran película sobre el entrenador Brian Clough, que logró con el humilde Derby County ganar la liga inglesa en 1972. Clough sería, años después, el artífice de una sensasional racha de triunfos para el Nottingham Forest.

Por Gonza SK
Los Ideales del Gol

En una época de fútbol convulso como en la que vivimos, se hace apreciar una historia sobre como era el fútbol sólo unas décadas atrás, donde los valores que primaban distan mucho de los actuales principios comerciales que rigen los designios de la actual economía que rodea el mundo del balón.

The Damned United, dirigida por Tom Hooper (El discurso del Rey) y basada en la novela de David Peace, narra la historia de los 44 días de Brian Clough al frente del Leeds United, enfocada desde la visión del polémico entrenador, junto con su inseparable ayudante Peter Taylor.


Brian Clough, nacido en Middlesbrough, fue el sexto de nueve hermanos de una familia de origen humilde del noreste de Inglaterra. Apasionado por el fútbol desde muy pequeño, comenzó a practicarlo en equipos amateur de su ciudad natal, hasta que tras prestar su servicio militar en 1953 comenzó a jugar en el Boro, donde logró asentarse en el primer equipo que por aquel entonces militaba en la Segunda División Inglesa. Anotó 204 goles en 222 partidos disputados a lo largo de seis temporadas, e incluso llegó a debutar con la Selección absoluta inglesa en 1959.

Después de esta gesta, Clough firmó por el Sunderland, donde continuó con su olfato goleador hasta que en 1962, en un partido de liga sufrió una lesión de ligamento cruzado anterior y se perdió el resto de la temporada en curso y la siguiente íntegra, en la que su equipo consiguió ascender a la Primera División. Tras una aparición testimonial con el Sunderland en la Primera División inglesa, durante la temporada 1964-65, Brian Clough tomó la decisión de retirarse por las secuelas que le produjo la grave lesión padecida años atrás. En 1965, tuvo un partido homenaje en Sunderland ante 31.000 espectadores, en el que jugó Clough con el dorsal 9 a pesar de su lesión, marcando simbólicamente su último gol desde el punto de penalti.

La película, en cambio, no hace referencia al Clough futbolista, sino que se centra en la marcada personalidad del entrenador en que posteriormente se convirtió. Durante esta etapa, comenzó en los banquillos del fútbol base en la temporada de su retiro, con aún sólo 29 años de edad. En la siguiente ya dirigió a un equipo de la cuarta división inglesa, el Hartlepools United, donde Brian contó con el apoyo de Peter Taylor como segundo entrenador, antiguo compañero de vestuario en el Middlesbrough en la época en que ambos eran jugadores. Taylor marcó la vida de Brian tanto en lo personal como en lo profesional. No sólo fueron íntimos amigos sino que formaron un tándem que llegó a conseguir éxitos y metas que de manera individual seguramente no podrían haber alcanzado.

En 1967, Clough y Taylor se marcharon a Derby, donde consiguen el ascenso a Primera durante su segunda temporada al frente del equipo. Y comienza una imparable carrera hasta que en 1972 el Derby County consigue con el campeonato de Primera División el mayor éxito de su historia. Posteriormente, Clough y Taylor se separaron debido precisamente a lo que narra la película: Iba a llegar la etapa más fatídica de la carrera deportiva de Brian Clough, su fichaje por el Leeds United, en aquella época probablemente el equipo más puntero de Inglaterra.

Clough y Taylor se reencontraron en 1976 en Nottingham, donde consiguieron el ascenso del Forest a la Primera División. Al año siguiente el Nottingham Forest consiguió el doblete, al conquistar la liga y la copa, y en 1979 y de nuevo en 1980 la Copa de Europa, hazaña que hasta el día de hoy no ha conseguido repetir ningún entrenador británico.

Brian Clough fue una figura única en el panorama del fútbol británico, conocido por sus declaraciones sinceras y políticamente incorrectas, dejó un extenso legado de arrogantes citas célebres hasta ser conocido por el apodo de “viejo creído”, que él mismo utilizaba para recordarse a sí mismo no volver a serlo. En cuanto a su faceta de activista, participó en el manifiesto de fundación de la Anti-Nazi League, organización política de carácter izquierdista que tuvo su apogeo a finales de los años 1970, también mostró su apoyo en huelgas de mineros, participando incluso en los piquetes de éstas. En dos ocasiones le fue ofrecido un puesto en el Partido Laborista para ser candidato al parlamento inglés y en ambas declinó el ofrecimiento.

Peter Taylor fue el escudero inseparable de Clough, tenía un gran talento para descubrir y elegir buenos jugadores, por lo que fue el responsable de la mayoría de los fichajes en los equipos en los que estuvo. La relación entre ambos empezó a deteriorarse por varias razones, pero el punto culmen fue el que Taylor, al frente del Derby County tras dejar el Forest, fichase a traición a Robertson prodecente del propio Nothingham que seguía siendo entrenado por Clough. Desde este hecho en 1983 se retiraron la palabra hasta la muerte de Taylor en 1990. Al enterarse Clough se hundió en la tristeza y posteriormente dedicaría su autobiografía y participaría en todos los actos de homenaje a Taylor.

sábado, 7 de enero de 2012